viernes, 22 de octubre de 2010

El 93,2% de los trabajadores aumentaría su formación para escapar del paro

Los trabajadores son conscientes del papel de la formación como palanca para salir del desempleo: el 93,2% de los 500 encuestados aumentaría su formación en el caso de estar parados.

La formación de los trabajadores es una pieza esencial para su desarrollo profesional y un elemento clave para aumentar su empleabilidad. Por ello, Adecco Training, la consultora de formación del grupo Adecco, ha analizado a través de una encuesta a 500 trabajadores los efectos que la crisis tanto en el comportamiento de las empresas como en el de los trabajadores.

La primera conclusión desprendida del análisis es que la mitad de las empresas de los encuestados no ha modificado su inversión en la formación a pesar de la crisis. Pero además, los profesionales consideran tan importante la formación para su propia carrera profesional que un 62% de los encuestados afirman haber recurrido al exterior para ampliarla ante la imposibilidad de obtenerla en su empresa.

La segunda conclusión, desde el punto de vista de la formación como palanca para salir del desempleo, destaca cómo las personas encuestadas son muy conscientes de ello: el 93,2% de ellas afirma que aumentaría su formación en el caso de estar parados.

Además de otros resultados, también se ha analizado cuál es la formación con más salidas profesionales actualmente según los trabajadores: casi el 60% de los encuestados asegura que es la Formación Profesional (FP). En cambio, si volvieran a tener que decidir sobre sus estudios, el 66% elegiría la misma opción.

La formación, el mejor camino para salir del paro

La respuesta ha sido tajante por parte de los encuestados: el 93,2% de ellos aumentaría la formación en caso de estar en paro. Y es que la formación es la llave del empleo y más aúnen tiempos de crisis. Prueba de ello es que el 87,5% de los parados demandantes de empleo del pasado marzo tienen estudios de secundaria o inferiores, mientras que el resto de las demandas de trabajo (12,6%) pertenecen a personas con estudios postsecundarios (ya sean formación profesional superior o estudios de segundo y tercer ciclo universitarios).

En épocas de cambio como el actual y en los que la demanda es superior a la oferta de trabajo, las empresas aumentan sus requisitos de entrada por lo que la formación es clave para mantener la competitividad. De hecho, según el Informe Infoempleo 2009 patrocinado por Adecco, la exigencia de una titulación, desde Bachillerato y FP hasta universitaria, es requerida por el 68,6% de las 200.000 ofertas analizadas en el estudio.

Según los encuestados, si estuvieran en paro y decidieran aumentar su formación, el 36,6% de ellos apostaría por la Formación Profesional, el 26% aprendería o mejoraría los idiomas, el 22,8% realizaría un máster o postgrado, el 9,8% aumentaría sus conocimientos informáticos y el 4,9% realizaría una carrera universitaria.

Pero si se analizan estos resultados según la formación que posee el encuestado, es destacable cómo la FP sería la elegida mayoritariamente por las personas con estudios elementales y secundarios si se quedaran en paro (según el 71% de ellos). Las ramas más mencionadas son las administrativas, de informática y sanitarias, elegidas por 3 de cada cuatro encuestados que estudiarían FP.

En cambio, en el caso de los universitarios, el 48,9% dice que aumentaría su formación en idiomas y el 33,3% que realizaría un máster. La lengua más seleccionada es el inglés, por el 97% de los encuestados, y entre los postgrados más mencionados son los de márketing y recursos humanos, votados por tres de cada cinco encuestados.

Mientras, más de la mitad de los profesionales con FP volvería a realizar otra formación profesional si se quedara en paro, un 16,7% mejoraría sus idiomas y un 12,5% iniciaría una carrera universitaria. Entre las carreras, destacan las ingenierías y Empresariales.

La conexión entre la formación y el mundo laboral

Una de las críticas a las instituciones formativas, especialmente a la universidad, es su grado de conexión con el mundo laboral. Es por ello, por lo que también la encuesta ha preguntado el grado de capacitación para la actividad profesional que le ha reportado su formación. Algo más de la mitad de los encuestados (52,3%) dice que la formación recibida ha tenido aplicación directa a su vida laboral, mientras un 29,5% dice que "un poco" y el 18,2% que "nada".

Pero esta percepción varía completamente si se analizan según los estudios adquiridos por los encuestados. El nivel de satisfacción sobre la capacitación para la actividad profesional es muy elevado en el caso de las personas con Formación Profesional: un 73,1% de los encuestados con este tipo de titulación así lo afirma. El siguiente grupo de encuestados más satisfecho es el de los postgraduados, ya que un 60% cree que la formación recibida tiene aplicación directa a su vida laboral.

El porcentaje desciende en el caso de los universitarios, los cuales sólo algo más de la mitad (un 56%) responden sí estar satisfechos con el grado de capacitación para la actividad profesional recibida en la universidad, el 30% dice estarlo "un poco" y el 14% "nada".

Un grado de satisfacción similar al de los universitarios presentan las personas con estudios elementales, mientras que los que poseen estudios secundarios presentan el nivel más bajo de todos: sólo un 14% dice haber recibido una formación que le haya sido útil para su trabajo.